Aquel misterio que me inunda
es como el agua que visita las acequias
nadie la puede describir
en esa fuente donde surge su promesa
ni como fuese su figura
aparecida como flor en primavera
para quitar la sed hiriente
del que reclama su piedad en esta tierra
es como el ángel que en la vida
con su poder y su embeleso aquí se muestra
desovillando los clamores
y apacentando el caminar de cada cuesta
para entonar un nuevo canto
durante el tiempo en que yo busco su elocuencia
todo misterio es don precioso
viene de Dios y precipita su presencia
cuando me inunda en sus matices
que son relámpagos de amor en cuya cera
viene pintado un historial
con que en secreto quiere dar lo que recrea
hasta poder beber su sombra
en plena luz porque Él es luz que centellea

	1

Recordé aquella noche
que enjoyada de estrellas
ofreció tantas luces
que encendieron las huellas
de mi infancia feliz
donde fui con mi diestra
señalando el sendero
que intentaba que fuera
el futuro horizonte
que enraizaba en la tierra
y aspiraba a la gloria
que aprisiona la esfera
cuando en noche sin luna
y sin lámpara o vela
he quedado en un éxtasis
con la paz que recrea
esos cuencos del alma
que añoraban la cena
donde en íntimo diálogo
recorrí lo que viera
en la noche mi alma
y en la luz de su estrella
que en su paz resplandece
y en su amor centellea

	2

Vi que la tierra en su silencio entona
contemplaciones de su propia esfera
donde el destello de la creación
dejó del Padre la inefable huella
Dios en su amor arrebató en sus dones
claros matices de su propia esencia
y han permitido que mis ojos gocen
esos colores que la flor expresa
y aquellos cantos que las aves alzan
como salmodia que su voz entrega
fue el paraíso terrenal el suelo
que redescubre en una tierra nueva
y ha de forjarse aquel Edén perdido
en cielo nuevo con su luz de estrellas
vibra Señor el firmamento magno
al exhalar la majestad que encierra
y aquel intento de entregar frutales
en obras puras que en tu amor destellan
canten creaturas luminarias vivas
luzcan los cántaros que su voz elevan
goce su estirpe la celeste brisa
surja la lluvia que a los hombres riega
para inundar nuestra pequeña historia
con los ornatos de una luz tan bella

	3

Soy sencillo labrador
que va tallando los surcos
donde guarda la semilla
como su seno fecundo
es vida lo que ella ofrece
y el precio del don futuro
es morir en tierra virgen
hasta cosechar maduro
el frutal que solo busca
alimentar lo más puro
del hombre que hubo vivido
buscando el caudal seguro
y hoy aguarda en el silencio
descubrir lo que produjo
la tierra que hubo tallado
para alimento del fruto

	4

Nuestro modelo fue María
que supo ver en el silencio la Palabra
en natural oscuridad
pues el camino de la fe se nos regala
sin que veamos lo que somos
ni comprendamos los misterios que rebasan
la fe proclama la certeza
de cada sílaba de Dios y su Palabra
y es garantía de la gloria
que es el secreto del Señor para las almas
Dios nos invita en su amor puro
a la sencilla aceptación de lo que narra
cuando al humilde corazón
le pide dar todo el amor ardiendo en llamas
la fe es tesoro que escondido
ha de vivirse en el encuentro que nos salva
cuando el Señor nos da en su Verbo
y en plenitud la redención que fue lograda
en aquel leño misterioso
formado en cruz para esos brazos que se clavan
para abrazar al que doliente
busca el consuelo que el Señor brindó en su arca

	5

Yo te canto mi Señor
y contemplando tu silencio alzo mi ruego
que es alabanza a tu deidad
por esa gracia que tu amor hundió en mi pecho
yo soy un simple narrador
que no podría en la palabra de mi suelo
enardecer a quien me escucha
porque tú vives en silencio y en secreto
y mi pobreza no ha logrado
enarbolar el canto altivo de tu acervo
quiero Señor en esta tarde
vivir la honda magnitud de tu misterio
y apaciguar esa ansiedad
que busca ver tu rostro vivo en mi aposento
yo solo puedo en mis entrañas
beber la luz que me arrebata este destierro
y acaparar toda tu vida
regocijando mi vivir en tu sendero

	6

He buscado encallar
mi canoa en la orilla
donde canta el jilguero
que agradece a la vida
y he querido soñar
episodios que un día
me mostraron su luz
que cual sol ilumina
pero el astro en la tierra
es calor que termina
y renueva sus luces
al nacer cada día
y ese sol de aquel tiempo
que soñaba y veía
es eterna promesa
y su ardor no culmina
pues el sol de los cielos
tiene voz infinita

	7

Hoy he buscado para siempre
aquella brisa que amanece en mi tonada
brisa de música y poemas
que me ofreciera la alegría que depara
el hacedor de aquellos surcos
donde emergieron las raíces de mi planta
que siempre quiso ver la luz
para quebrar la oscuridad que se propaga
cuando aquel astro luminoso
fuera olvidado por las nubes que acaparan
con los colores de su piel
aquellos rayos que mostraran su balada
siento vivir ante mis ojos
al Dios que surge amaneciendo en mi jornada
para que en diálogo filial
al que me invita con su voz y su mirada
pueda encontrar en el silencio
aquella luz y aquella paz que fue donada
creo en la brisa de la gloria
donde al final toda verdad será gozada
y aquel amor que está en el Padre
ha de engendrar haces de paz en mi posada
y en comunión con los que viven
he de gozar de aquella Patria conquistada

Escuché aquel gemido
que anunciaba en la tarde
el final de ese día
que es ocaso y se abre
para hablar de otro tiempo
con distintas verdades
y esgrimir esas armas
que los propios mortales
utilizan sabiendo
los peligros que nacen
en la oscura celada
y en la noche del valle
caminé sin tropiezos
con la fuerza del ave
cuyo viento me eleva
y me envuelve en sus aires
que dejaron sin armas
peligrosos anclajes
que del suelo trepaban
con grotesco coraje
por matar la inocencia
que es tesoro que arde
en el alma que busca
remontar esa tarde

las alturas del cielo
coloquiando en su traje
con el huésped del alma
que dejó su equipaje
por quedarse a vivir
en la luz de mi nave

	11

Vivo sólo con Dios
los oídos del hombre no escucharon
los anuncios del cielo
que intentaron respuestas en mi campo
pero yo oí su voz
que en un íntimo trance de mi hallazgo
me invita a proclamar
las eternas verdades que enmarcaron
los gemidos de Dios
por la voz ignorada y el rechazo
de los hijos que anhelan
en la fe descansar entre sus brazos
más de pronto descreen
y no saben gozar en ese abrazo
de la luz que del cielo
intenta disipar sombras y atajos
feliz aquel momento
en que pude decir que yo lo amo
al Señor que me busca
y concede a mi vida sus regalos


mis gracias oh Señor
por haber comprendido tu cansancio

y buscar pobremente
responder a tu amor en pie descalzo

	13

He deseado entonar
expresiones de gracias
porque todo fue dado
cual regalo en mi casa
el que hiciera los bosques
y también la montaña
el que puso en los cielos
las estrellas que danzan
o en la voz de las aves
las canciones del alma
y en el astro fulgente
esa luz y la zarza
Él me dice en su Verbo
los anuncios que salvan
y el amor que me inunda
y la luz que Él derrama
porque es Padre que busca
en los hijos que aman
entregar su alegría
y la paz que reclaman
a su Padre del cielo
cuyo amor no descansa

	14

I

Sé que yo escucho a mi Señor
en aquel vuelo de las aves y en su trino
en la tormenta que en su trueno
me anuncia el agua que alimenta mi destino
en el rugido de los bosques
o en el relámpago que alumbra donde vivo
y lo escuché cuando en el mar
las olas hablan con la fuerza de su estilo
y en el gorjeo de los pájaros
que me despiertan en concierto matutino
sé que yo veo a mi Señor
en la altivez de la montaña como alpino
en la hermosura de la flor
y en la ondulante variedad de cada estío
sé que mis ojos lo contemplan
en la grandeza singular del mundo andino
en el azul que muestra el cielo
y en la blancura de las nubes que han nacido
para alentar con sus primores
la tierra virgen que amamanta al propio trigo
así lo escucho así lo veo

al creador cuyo esplendor está en mi nido






II

Pero el silencio es la palabra
con que me expresa su presencia misteriosa
quiero escuchar la voz del sol
y sólo puedo descubrir la pura sombra
donde se esconde ante mis ojos
para que busque sin cesar a quien me nombra
él no conversa con mis labios
pero es palpable su presencia en cada hora
y no me entrega sus colores
pero yo siento la belleza de sus obras
es la palabra creadora
que se ha callado en el ocaso de mi choza
es el silencio majestuoso
que tanto escucha las palabras de mi boca

eres el ser que trascendente
a cada cuenco de mi tierra lo desborda
y como el mar en su grandeza
no puede entrar en el recinto de mi copa

	17

Me gozo en el ángel
que alumbra mi alma
con voces de cielo
y luz que derrama
ese íntimo diálogo
que invita en sus alas
a vuelos que llevan
con música y arpa
a dar gloria a Dios
y hundir en su carpa
mi humilde racimo
en notas que ensayan
un himno de gloria
y profundas gracias
al Dios que en mi pecho
fijó su morada
mi ángel adora
al Rey que en su estampa
regala sus flores
su paz y su llama
te pido en mi choza
oh ángel que danzas
entones al Padre
por mí tu alabanza

eterna que aguardo
contigo cantarla

	19

He caminado en el desierto
y descubrí los manantiales en la arena
humildes huellas de quien busca
encaminarse hasta los bordes de la acequia
es el desierto duro y áspero
el que recoge la verdad y la destreza
de cada hombre que ha querido
aleccionar cual peregrino su existencia
dotándola de aquella luz
que le permita recorrer su propia escena
con la certeza de saber
que toda vida es madurada en la paciencia
y en el trabajo silencioso
y en aquel gozo de aguardar lo que se espera
deshilvanando lo creado
hasta vivir en pura luz la trascendencia

	20

Escuché aquellos pasos
en la senda lejana
y advertí que sus huellas
en silencio me hablaban
y al correr de las horas
recogí la mirada
y el oído entreabierto
escuchó las pisadas
que muy lentas venían
a posar en mi carpa
y también escuché
que el Señor me llamaba
con sus pasos sedientos
de mi voz y mi llama
y sentí que de pronto
mis portales golpeaba
para entrar en mi techo
y volcar su palabra
cual licor que se precia
en la copa del alma
y bebí de su aroma
y escuché su balada
que el Señor en su paso
con amor dedicaba

para el hijo pequeño
que vivió su alborada

	22

Sé que el Señor con su secreto
ha resguardado la infinita trascendencia
de su camino silencioso
por donde quiere asir mis pasos con su diestra
he conocido en mis anales
las maravillas de ese Dios que me recuerda
aquel origen de mi vida
en aquel seno de mi padre que me lleva
a conquistar entre los cerros
suntuoso alcázar que me ofrece en otra tierra
para gozar con mi alegría
y eternamente cobijarme en su represa
sé que la paz que me regala
es puro don de su amor santo que se allega
hasta ese cuenco de sus hijos
que han descubierto al caminar preciosa perla
y han transformado su alegría
al vender pobres posesiones que tuvieran
para adquirir el rico precio
de la gloriosa eternidad que nos espera

	23

He soñado despierto
y se ancló la mirada
en estrellas que vienen
dando fuego a la zafra
y he invitado a observar
las bellezas que canta
el autor de su tiempo
cuya luz enjoyara
a los astros que vuelan
en la noche y su danza
porque fue el escenario
de presencias tan cálidas
en el cielo que alumbra
y en el hombre que aclama
la inocencia de soles
cual gigantes que callan
pero arrojan sus ecos
en quien busca su llama
invocando al eterno
que en su rostro derrama
la pureza del ángel
y el fervor del que ama

	24

He podido beber
las verdades ocultas en mi roca
y he sabido verter
aunque el sol me sofoca
las palabras que surgen en mi boca

es palabra divina
la que anuncia misterios insondables
es luz que me adivina
y en horas inefables
es verdad y es amor imponderables

el Dios que me ha creado
purifica mi vida en su mirada
es gracia que me ha dado
y exige en mi tonada
un canto de alabanza enarbolada

la gloria donde mora
el Señor de los cielos me extasía
me inunda en cada hora
de la gracia que ansía
elevarme a la casa que ya es mía

oh Padre generoso
manantial que alimentas cada sueño
abrigo en mi reposo
al ver arder tu leño
aparcar en la celda de mi dueño

	26

Sublime misterio
incluye en su nombre
el Rey de los cielos
que entrega sus dones
Él sabe que el hijo
es débil y es pobre
y busca en su senda
hablar lo que esconde
de grandes misterios
el Dios de los hombres
que dio sus delicias
que sacian sus odres
y ofrece su casa
al niño que expone
humildes palabras
y bellas canciones
al Padre que sabe
aliviar dolores
y enjugar el llanto
nacido en los montes
donde el hijo encuentra
cual ave del bosque
el canto apropiado
que merece el nombre

del pastor que cuida
mi vida en su cofre
ansiando aquel día
que el Padre conoce

	28

Fui caminado por la senda
que me anunciaba la llegada de mi puerto
y hubo cansancio al intentarlo
y oscuridades que anunciaban el desvelo
toda la vida en su destino
ha de sufrir ondulaciones de un destierro
que fortalece la confianza
al conseguir tras el dolor el tiempo nuevo
Dios no se cansa de aguardar
nuestro sencillo caminar aunque sea lento
y siempre ofrece en su piedad
aquellas huellas que me indican derroteros
y he de buscar en la tormenta
o en marejadas que se hamacan en su viento
hasta encontrar huella segura
para volcar la propia historia en mi terreno
dónde me aguardan melodías
y la fragancia en una flor del vertedero
corro seguro al intentar
la eterna paz y aquella gloria que celebro

	29

Conocí sendas huellas
que marcaron mi senda y mi fatiga
y han podido lograr
esa paz que se alberga en mi alegría
sólo Dios puede dar
la experiencia que aguarda toda vida
de encontrar esa perla
que conduce a tener lo que me urgía
por hallar en la tierra
destellos de verdades que me abrigan
y me invitan a ver
con los ojos que al cielo me encaminan
y me piden vivir
el magnífico don de cada brisa
que inundada de luz
providente a los hombres ilumina

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